Es un semisótano con techo abovedado de medio cañón de ladrillo visto y de una gran capacidad arquitectónica en San Sebastián de los Ballesteros. La función original concebida por los jesuitas para esta sala se encaminaba a aislar y evitar humedades a la planta superior concebida en parte como almacén de los productos agrícolas cultivados en la finca. En el siglo XX se estableció en toda la nave un horno de pan, es a partir de entonces cuando fue bautizada con el nombre de La Tahona, que ha perdurado hasta finales de la citada centuria.